domingo, 31 de agosto de 2014

Un busto de Miranda quedó en cada sitio que visitó en Grecia

Francisco de Miranda visitó Grecia en 1786 con el propósito de conocer la cuna de la civilización occidental, de conocer las estrategias militares de los generales griegos durante las batallas épicas contra los persas y por supuesto conocer el sitio donde nacieron los filósofos estudiados por él y sus tratados para fortalecer su empresa de crear una República en las colonias americanas invadidas por el imperio español.

Miranda en Grecia
Francisco de Miranda visitó Grecia en el año 1786 contra todo consejo de no ir debido a la invasión que mantenía en ese país el Imperio Otomano, sin embargo, viajó desde Duvrovnik  en barco hasta Patras en el Peloponeso donde pisó tierras helenas un 15 de mayo de ese mismo año a las 3 de la tarde, según escribió en su Diario Colombeia.
Allí se colocó una imponente estatua de 2 metros y 53 centímetros donada por la Fundación Generalísimo Francisco de Miranda en la Plaza Miranda que la Municipalidad de ese Municipio nombró por unanimidad ante el importante hecho de ser el primer americano que pisó sus tierras (Cuando escribo americano me refiero a lo que me refiero: de toda América y no como erróneamente se dice en muchas partes del mundo para referirse solo a los estadounidenses).
La estatua de Miranda en la Plaza Miranda en Patras
De allí siguió a Corinthios donde estuvo varios días, allí también se encuentra un busto del genio venezolano.
Durante esos días decidió visitar las ruinas del templo a Zeus en Nemea, donde también se colocó un busto de Miranda, para recordar su paso por ese sitio mítico.
Estas columnas son mencionadas por Miranda en su Diario cuando las visitó.

Miranda menciona tres columnas, pero luego de las restauraciones aumentaron a las actuales ocho.

Develación del busto de Miranda en la localidad de Nemea

En Nemea ubicada en el Peloponeso, quedó para la inmortalidad este busto de Miranda 
Antes de llegar a Atenas pasó por la Isla de Salamina donde recordó sus estudios del la gran Batalla de Salamina y pudo revisar las estrategias de Temístocles contra el Rey persa Jerjes, en esa isla se develó un busto del más universal de los venezolanos en su paso por esa isla.
Al llegar a Atenas recorrió todos los sitios históricos detallando todo lo que encontraba a su paso y escribiéndolo en su diario, allí también quedó un busto para honrar al viajero venezolano que vino en la búsqueda de conocimientos para liberar a Hispanoamérica.
Con el apoyo de un grupo de especialistas en el submarinismo y la navegación se creó la plaza Miranda en el Mar Sarónico frente a las costas de Atenas donde se lanzó un busto del genio venezolano para dejar su presencia inmortal en aguas que él navegó buscando e investigando sobre diversas temas para hacer la Gran República en Hispanoamérica conformada por las colonias españolas de América.


Un busto de Francisco de Miranda fue lanzado también al Mar Sarónico frente a las costas de Atenas.
Un grupo especializado en el submarinismo y la navegación realizó el lanzamiento del busto a la plaza marina Miranda
En su estadía en Atenas no dejó pasar la oportunidad para viajar hasta Marathón, realizando una travesía de 8 horas a caballo, desde las montañas y en el sitio mismo analizó todo lo referente a la Batalla de Marathón, el museo de esa población contiene un busto de Francisco de Miranda en su entrada.
Todo este trabajo realizado por la embajada venezolana en República Helénica representa un homenaje al genio venezolano que recorrió el mundo conocido para entonces y tuvo contacto con las primeras figuras del mundo político de ese momento histórico, desde Emperatrices, Duques, Presidentes, Primeros Ministros y Príncipes, además de relevantes figuras de la iglesia.


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